SER O NO SER
¿A quién buscáis? Queridos lectores: Como sabéis, vivo perseguido desde hace años, y en todo ese tiempo he estado publicando mis vivencias y reflexiones. Daba por hecho que denunciando malas acciones contribuía a una sociedad más justa, más libre y más orientada a la verdad. Escribí por obligación moral, por necesidad de compartir y por conciencia cívica, y me gané muchos enemigos y antipatías. Ahora sigo relatando mis peripecias, aunque más espaciadamente, porque veo que también hace falta mostrar las disposiciones personales que hacen posible sobrellevar la adversidad. Es fundamental para los cristianos que nos metamos en la refriega a pesar de nuestras limitaciones, movidos por la fe y no por seguridades de otro tipo. De lo contrario ¿cómo sabríamos que confiamos en Dios? Nuestra poquedad está ahí y nos la vamos a topar siempre, pero también Dios estará siempre ahí para sacarnos del atolladero. Pensemos que la enseñanza del Evangelio y de la tradición es para personas cor...