LA PRENSA QUEMA-CONVENTOS AL DESCUBIERTO

Al comentarle a un obispo cierta persecución de que soy objeto, sufría yo pensando que no iba a creerme, pero me tranquilizó diciendo que acababa de llegar de la cárcel, de visitar a un sacerdote condenado por la acusación de testigos falsos. Varios de éstos me han sentado en el banquillo en varias ocasiones, y tan sólo por la Providencia de Dios, que vino a mí con la evidencia de sus mentiras, pude librarme del severo castigo del Juez. Abran los ojos los que aún duermen... porque vivimos lo mismo que hace cien años precedió a la guerra: un ataque frontal a la verdad, a la conciencia de los ciudadanos, al respeto del código de convivencia, y a Dios. Entonces quemaban iglesias y conventos, y los saqueaban; y hoy hacen lo mismo pero quemando las vidas de las personas que frecuentan esos lugares sagrados: sacerdotes, religiosos y laicos. La persecución no cesa. En la noticia de hoy que pego a continuación, no hay ninguna prueba de la conducta delictiva del supuesto sacerdote de...